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Este slogan lo utilizamos mucho en los tiempos de la Guardia Colora y de los asesinatos dirigidos a los núcleos juveniles de los anos 70 y 80.
Este slogan se ajusta mucho a la realidad por la que atravesamos hoy los dominicanos. La lucha que se cierne hoy sobre nuestra tierra tiene mucho que ver con la compra de conciencias y por el permisivismo de las autoridades al latrocinio y al trafico de influencias para enriquecerse a como de lugar sin impórtales un comino la realidad dura en que la mayoría de nuestra gente esta sumergida en estos momentos.
Nosotros no podemos pasar por alto esta situación que se avecina. Debemos dar nuestro apoyo enarbolando este slogan que tanto logro en epopeyas de luchas de nuestro pueblo en contra de la opresión y la falta de libertades ciudadanas.
Un pueblo sin fe no llega a ningún lado. Un pueblo con hambre no tiene los medios de salir hacia delante. Un pueblo negado a tener una educación digna no puede avanzar. Un pueblo amordazado no puede reclamar.
La reforma fiscal nos atañe a todos pero en especial a las clases mas desposeídas de la republica. Ser indiferente a esta blasfemia es negar nuestros orígenes cristianos.
Pidamos a Dios por cordura y luz en este túnel oscuro en que nos quieren acorralar las autoridades de turno. Digámosle no a esta reforma con el lema Vergüenza contra el dinero!
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