Protagonistas de la obra de la vida

Por josefina almanza.--En el escenario de la vida existen varios personajes con papeles diferentes y únicos que realizar, con actuaciones propias, aunque en muchas ocasiones se tenga un guión, un libreto común. 
     
Estos personajes tienen su puesto y su valor dentro de toda la obra teatral que a diario se le presenta.  Tienen que ejecutar su papel y desarrollarlo a su máxima plenitud.  En muchos momentos no saben cómo actuar, cómo representar el papel que en ese momento le tocó. No saben colocarse en el momento preciso.
     
Cada uno tenemos una actuación en la obra de la vida,  por lo cual debemos dejar fluir las actuaciones en el escenario, es decir debemos dejar que los actores  hagan su trabajo, realicen su función.
    
Habrá algunos que tendrán actuaciones principales, de primera. Serán los protagonistas, por lo tanto, sus responsabilidades serán mayores, sus habilidades tendrán que ser mejores para representar de manera excelente su papel.  Habrán otros que tendrán un papel secundario, tras bastidores, detrás del telón pero esto no quiere decir que su actuación sea menor o de una calidad inferior porque todos  tendrán un lugar, un espacio propio donde realizarse y cumplir su rol y el conjunto armónico de las actuaciones de todos los actores y actrices será lo que al final manifestará la Gran Obra.  El trabajo y el esfuerzo de todos juntos lograrán una sinfonía espectacular.
     
Es por ello que desde donde estemos, en la posición que nos encontremos, debemos representar de manera excelente nuestro papel, sin querer quitar espacios, sin querer robar escenarios.  Cada quien es cada cual, cada quien puede ser protagonista en un momento determinado y también puede estar tras bastidores en otro momento.
     
Debemos saber ubicarnos en el tiempo y en el espacio porque en una misma obra, en una misma película no puede haber varios protagonistas al mismo tiempo. Debemos dejar producir los acontecimientos y enfrentar las circunstancias sabiendo el papel que se debe representar, así sabremos triunfar y salir airoso en la Gran Obra de la Vida.

La autora es abogada y docente universitaria.