miércoles, 10 de septiembre de 2014

Desempleo juvenil: Tarea común UN PROBLEMA QUE GENERA EXCLUSIÓN SOCIAL

El desempleo juvenil, que duplica el de la población general, tiene varias causas y por eso se requieren estrategias diversas para contrarrestarlo. La población afectada por este fenómeno -un desafío común a varios países de la región- no puede superarlo sola. 
Tanto el Estado como las empresas y las instituciones educativas tienen un rol que desempeñar para contribuir a reducir una problemática que genera exclusión social y reproduce el círculo de pobreza en el que viven muchas familias.
Las iniciativas varían desde programas de capacitación y pasantías, leyes que promuevan el acceso al primer empleo, adecuación de la oferta académica y mejoramiento de los procesos de intermediación laboral.
En todos los casos, el camino que conduce a la reducción del desempleo juvenil luce largo y complejo. 
Cifras promedio
Entre 2008 y 2011, la tasa promedio de desocupación entre hombres de 15 a 19 años fue de 25.4%; de 20 a 24, 18.9%, y de 25 y 29, 10.6%.
Entre las mujeres de 15 a 19 años fue de 47.9%; de 20 a 24, 38.2%, y de 25 a 29, 25.3%.  ((Por rango de edad
Estrategias contra el desempleo
El economista Fabricio Gómez Mazara, autor de “Relación entre juventud y empleo en República Dominicana”, opina que en el país no ha habido políticas activas de empleo juvenil.
El proyecto mejor valorado ha sido el Programa Juventud y Empleo, ejecutado por el Ministerio de Trabajo con la cooperación del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Desde 2002, el programa en cuestión se enfocó en mejorar la empleabilidad de jóvenes de bajos recursos en situación de riesgo mediante una combinación de capacitación y pasantías.
Pero dicho programa, cuya efectividad a largo plazo evalúa actualmente el BID, contribuye a paliar el problema sólo en parte.
Dentro de la masa de desempleados existen jóvenes con formación de grado y postgrado, en parte porque la oferta académica del país no siempre responde a los requerimientos del mercado laboral, comenta Gómez Mazara.
El economista dice que el Estado, a través del Ministerio de Trabajo, las universidades y los empresarios deben desarrollar una estrategia conjunta para contrarrestar esa situación: el Estado proyectando qué sectores tienen un mayor crecimiento y las empresas especificando el perfil profesional que buscan para que, sobre la base de esa información, las universidades adapten su oferta.
“Eso es lo que va a garantizar que los jóvenes que egresen de las universidades puedan encontrar empleo en esos sectores”, afirma Gómez Mazara.
El rol de las academias
Sobre el rol de las universidades frente a este problema, el rector del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (Intec), Rolando Guzmán, asevera: “Solo una educación pertinente, apropiada a las necesidades, logrará reducir la tasa de desocupación entre los profesionales”.
En ese marco, expresa el educador, las universidades tienen tres tareas esenciales: aportar programas de calidad que desarrollen las competencias básicas de los nuevos profesionales; diseñar mecanismos de inserción que faciliten el tránsito de sus egresados desde la universidad al ambiente productivo; y mantener una oferta flexible de educación continua que permita la adecuación de los empleados a las necesidades del mercado.
“Todas las universidades deben trabajar, junto a las autoridades y las empresas, para responder a esas demandas”, manifiesta.
Radhamés Mejía, rector de Apec, coincide en que el rol principal de las instituciones de educación superior sigue siendo formar profesionales al más alto nivel, pero advierte que el país no sólo debe crear fuentes de empleo, sino también revisar la compensación económica que reciben los profesionales.
“Ese es un tema de política pública que se tiene que plantear abiertamente”, expresa. “Todos tenemos que luchar porque la sociedad le ofrezca mejores oportunidades al profesional que se forma”.
Primer empleo
En 2008 la diputada peledeísta Karen Ricardo introdujo al Congreso un proyecto de ley de primer empleo que chocó de frente con la oposición de diversos sectores de la sociedad.
Rafael -Pepe- Abreu, presidente de la Confederación Nacional de Unidad Sindical (CNUS), se encuentra en el grupo de quienes, en su momento, se opusieron al proyecto y aún hoy se muestra en desacuerdo con cualquier intento de limitar los derechos laborales del joven a fin de de permitirle acceder a un puesto de trabajo.
“La impresión del primer empleo debe ser favorable para que el joven no cambie su visión del trabajo como el medio por el cual puede mejorar su vida”, argumenta Abreu.
Rechaza la posibilidad de introducir cambios en el Código Laboral como estrategia de fomento del empleo juvenil, y hace una propuesta distinta: que el Estado compense a las pequeñas y medianas empresasque ofrezcan su primer empleo a un determinado número de jóvenes, comprometiéndose a asumir los pagos correspondientes a la Seguridad Social durante 12 meses, de modo que el empleador sólo incurra en el pago del salario y las demás compensaciones establecidas en el Código de Trabajo.
De ese modo, las pequeñas y medianas empresas no asumirían una carga muy pesada y los jóvenes podrían adquirir experiencia, ese requisito por el cual hasta al egresado universitario se le cierran las puertas.
Por otro lado, sugiere a las instituciones educativas no limitarse a evaluar las aptitudes académicas del joven, sino detectar su calificación técnica y otras habilidades que le serían útiles para ingresar al mundo laboral.  
VACANTES Y TALENTO
 La información no fluye

Para Karleen Pagán, experta en reclutamiento de personal, en el país existen fallos en el flujo de información entre reclutadores y talentos.
“Hay vacantes y hay talento”, afirma la directora general de Identidad RH.
¿Qué sucede entonces? Que, por un lado, los empleadores no saben cómo llegar al potencial empleado y este último, a su vez, no sabe cómo hacer llegar su currículum a la empresa.
Esta dificultad afecta de manera especial a los jóvenes que buscan su primer empleo; carecen de experiencia y contactos.
En la actualidad, gracias a la tecnología, existen más mecanismos y medios por los cuales dar a conocer la información; sin embargo, según Pagán, las empresas deben mejorar sus estrategias de reclutamiento.
Por eso, a pesar de la existencia de herramientas digitales, en los últimos meses han proliferado las ferias de empleo en las cuales empleadores y solicitantes buscan tener un contacto directo.
La firma que dirige Pagán organiza, el 17 y 18 de este mes, la feria Expo Empleo en el Embassy Suites by Hilton.
Entretanto, la empresa de zonas francas Laurus International anunció que realizará una feria de empleos en San Juan de la Maguana del 19 al 21 del mismo mes.

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