El peligro del Ébola

El brote del ébola surgido en tres países del África ha alcanzado la mayor magnitud de esa peligrosa enfermedad sobre la cual aún no existen antídotos conocidos, por lo que su mortalidad es, según se estima, de más del 60% en algunos casos y de cerca de 90% en otros. En los brotes antecedentes el ébola no llegó a superar los 400 casos. En el actual brote ha superado ya los 2 mil casos con una mortandad de más de mil casos.

   
Una particularidad de el actual brote es que tres casos han llegado a Europa, específicamente a España, y otros dos casos a los EE.UU, luego de que los afectados cumplieran misiones humanitarias en esos países africanos y contrajeran el virus mortal, siendo luego trasladados a sus  países de origen, luego de que se tomaran todas las medidas de prevención para aislar a los afectados y someterlos a los tratamientos experimentales en estudio. Esa situación ha conmovido al mundo entero que ahora se encuentra atemorizado por la peligrosa enfermedad.
   
Aquí en nuestro país, las autoridades de Salud Pública han anunciado que han tomado algunas precauciones, sobre todo en los puertos, con la anunciada intención de evitar que ese mal entre el país y azote a una mal cuidada y atendida población.     El anuncio, sin embargo, no ha convencido y no deja de preocupar a muchos sectores, desde ya atemorizados por la expansión del ébola, virus mortal que, como otros, fácilmente pudiera entrar al país dada la gran debilidad y pobreza institucional que caracteriza al país, tal como quedó en evidencia con el virus de la Chikungunya, que hasta ahora ha afectado a más de medio millón y todavía sigue su curso, causando ya algunas muertes pese a que no se le atribuye una peligrosidad, como el es caso del ébola.
  
 Frente al ébola las autoridades se deben emplear a fondo y recurrir a toda la “modernidad” disponible y operativizar un plan para su prevención que tome como puntos de control sobre todo a la frontera con Haití, que es el punto más neurálgico y vulnerable por donde han entrado otras plagas que han afectado con grandes pérdidas al país, tales como fueron la fiebre porcina, el VIH-Sida, el cólera introducido por la Minustad, entre otras plagas sanitarias. No se debe descartar el cierre sanitario de la Frontera, mediante un operativo especial para la ocasión, dado las vinculaciones de los vecinos haitianos con los países originarios del África.
   
De igual modo las autoridades de Salud Pública, deben hacer conciencia de la necesidad de un esfuerzo mayor para vencer la inercia de una rutina muy pesada que opera como un gran obstáculo que impide la motorización de una cansada burocracia, que obstruye la operatividad efectiva de esa organización oficial.
   
Se requiere de la fuerza de un liderazgo vigoroso que mueva esa necesaria acción para proteger a la Nación, por lo que resulta imprescindible la presencia de la voluntad del Presidente de la República y la orden para constituir un órgano especial (ADHOC) de salud para llevar a cabo el Plan Nacional de Prevención del ébola.

¡Qué no se descuiden en eso y manos a la obra!