sábado, 2 de febrero de 2013

NUESTRA REALIDAD SOCIAL O MAS BIEN NUESTRA DOBLE MORAL


Cuando pensamos en un programa de gobierno que pueda erradicar la delincuencia, las violencias, la criminalidad, el irrespeto, la corrupción, los embarazos de adolescentes no deseados, los exagerados consumos de juegos (tres veces al día), de alcohol, de sustancia no permitidas, así como tantos males que nos afectan desproporcionadamente a cada ciudadano (a).

Los cuales hemos sentido como a un amigo, conocido o integrante de la familia han sido víctimas de algún hecho o atentado de estos males como conflictos que hemos dejado crear los adultos, los mayores en nuestra desprotegida sociedad…

Nuestras autoridades que en sus diferentes turnos partidarios.

Desde hace décadas conjunto a muchos intelectuales, políticos, dirigentes sociales, eclesiásticos, comunicadores, entre otras personalidades de importancias social, han y aun coinciden en sus distintas opiniones para la soluciones a tantos males sociales que nos afectan, diciendo que la mayor alternativa es;

Erradicar la pobreza, que hasta hoy se han quedado en palabras a medias…

Estas múltiples coincidencias que se manifiestan a conciencia sentida o a des conciencia irreal, las cuales pocos observamos, pero cada vez mas otros se suman, donde vamos observandos;

Sus actitudes.
Sus acciones.
Sus ejemplos.

De doble comportamientos que nos hacen visualizar con un tacto perpetuo como son tan aguerridos para cuidar sus ideales, sus beneficios, su poder, hasta dar sus últimos alientos con un sutil suspiro aterrador para los demás, haciendo prevalecer que en;

Nuestro pueblo quisqueyano.
En su pueblo quisqueyano.

Es mejor mantenerlo sumido en la ignorancia perpetua, creando anarquías, teatros sociales, conflictos sociales, males sociales para poder satisfacer impunemente las oscuras necesidades de ansias descontroladles de unos cuantos que por muchas décadas nos han dirigidos a través de los diferentes partidos dominicanos…

Que para unos cuantos es mejor un;

Un pueblo sin una educación correcta, idónea que no nos permiten tener cierto grado de cultura intelectual, conciencia colectiva, participación ciudadana…

Un pueblo sin conocimientos de las normas morales, las cuales son tan imprescindibles, necesarias, vitales, para la armonía social, la calidad humana de cada persona, de cada ciudadano…

Un pueblo sin cualidades éticas, que no nos permiten ser en su alto porcentaje ciudadanos (as) disciplinados con nosotros mismos, con nuestras familias, con los demás, como trabajadores, como profesionales, así como en todas nuestra diversas ocupaciones que existen para regirnos…

Donde cada vez más nos alejamos de los valores divinos, de la sensibilidad humana, de la calidad social para todos y entre todos…

Cuantas catastróficas barbaridades inmorales, anti éticas, inhumanas observamos a diario, a cada hora, en cada minuto de las 24 horas del día…

Y cuanto dolor, cuanto sufrimientos pasamos los dolientes (as), los padres, las madres, las familias desprotegidas que con tantas precariedades buscamos soluciones a nuestras necesidades que nos están afectando desproporcionadamente...

Cuantas impotencias tenemos que aguantar, que soportar…

Que nos hacer estar hipnotizados, sumisos ante los que creemos con capacidad intelectual, humanas, de dirigirnos a través de los bienes y recursos pagados de nuestros impuestos constituidos en nuestra carta magna.

Pero la realidad es que un pueblo;

Sin una educación correcta, idónea, es un pueblo ignorante, un pueblo atrasado, un pueblo ineficiente, un pueblo donde el más fuerte abusa del derecho ajeno, del derecho a la vida, un pueblo donde no se respeta los derechos y deberes fundamentales consagrados en la carta magna.

El ego, la grandeza, el egoísmo, las ironías, la ambición desmedida de riquezas, hacen de muchos que de una u otra formas nos dirigen ya sea por sus participación comunicativas, políticas, sociales, de servicios público, privados, personas terrestres que muchas veces se endiosan afectando el bienestar y progreso de la patria.

Los cuales si tienen suficientes poder, por sus múltiples funciones para pensar en ellos mismos y no en el bienestar colectivo de los demás…

Pues así nos lo han demostrado a través de la historia contemporánea que por décadas han sido cada vez más visibles, demostrando sus DOBLE MORAL…

La solución a estos males sociales que afectan a nuestro país, no es tan solo erradicar la pobreza, pues como sería una sociedad sin pobres donde no exista una cultura moral, divina, ética, humana, social que les garantice la armonía, el respeto, el progreso y la paz ciudadana…

Pues sería un ejemplo de una anarquía social, una descomposición humana, una sociedad artificial, sin sentimientos, una sociedad de egoísmos personales…

Es fundamental que a la vez eduquemos a nuestras familias, a nuestros hijos, a nuestros niños, a nuestros jóvenes, a nuestra sociedad en general, con una educación idónea, moral, divina, ética, humana, social.

Garantizando la formación de ciudadanos (as) dignos, capaces, profesionales, los cuales cuenten con capacidades intelectuales, cualidades disciplinarias, cualidades científicas, cualidades para discernir entre el bien y el mal, de lo correcto a lo incorrecto, cualidades para saber cuál es su rol social, cualidades para saber elegir que es lo que más le conviene a su pueblo moralmente…

Es nuestro deber y derecho para con nuestra patria, nuestras familias, nuestras futuras generaciones…

Tu, yo, el, ella, todos podemos ser parte de este cambio, de esta transformación a las normas morales…

Que nuestro Dios todopoderoso interponga su mano bendita en toda nuestras conciencias ciudadanas, amén.
Cuando pensamos en un programa de gobierno que pueda erradicar la delincuencia, las violencias, la criminalidad, el irrespeto, la corrupción, los embarazos de adolescentes no deseados, los exagerados consumos de juegos (tres veces al día), de alcohol, de sustancia no permitidas, así como tantos males que nos afectan desproporcionadamente a cada ciudadano (a).

Los cuales hemos sentido como a un amigo, conocido o integrante de la familia han sido víctimas de algún hecho o atentado de estos males como conflictos que hemos dejado crear los adultos, los mayores en nuestra desprotegida sociedad…

Nuestras autoridades que en sus diferentes turnos partidarios.

Desde hace décadas conjunto a muchos intelectuales, políticos, dirigentes sociales, eclesiásticos, comunicadores, entre otras personalidades de importancias social, han y aun coinciden en sus distintas opiniones para la soluciones a tantos males sociales que nos afectan, diciendo que la mayor alternativa es;

Erradicar la pobreza, que hasta hoy se han quedado en palabras a medias…

Estas múltiples coincidencias que se manifiestan a conciencia sentida o a des conciencia irreal, las cuales pocos observamos, pero cada vez mas otros se suman, donde vamos observandos;

Sus actitudes.
Sus acciones.
Sus ejemplos.

De doble comportamientos que nos hacen visualizar con un tacto perpetuo como son tan aguerridos para cuidar sus ideales, sus beneficios, su poder, hasta dar sus últimos alientos con un sutil suspiro aterrador para los demás, haciendo prevalecer que en;

Nuestro pueblo quisqueyano.
En su pueblo quisqueyano.

Es mejor mantenerlo sumido en la ignorancia perpetua, creando anarquías, teatros sociales, conflictos sociales, males sociales para poder satisfacer impunemente las oscuras necesidades de ansias descontroladles de unos cuantos que por muchas décadas nos han dirigidos a través de los diferentes partidos dominicanos…

Que para unos cuantos es mejor un;

Un pueblo sin una educación correcta, idónea que no nos permiten tener cierto grado de cultura intelectual, conciencia colectiva, participación ciudadana…

Un pueblo sin conocimientos de las normas morales, las cuales son tan imprescindibles, necesarias, vitales, para la armonía social, la calidad humana de cada persona, de cada ciudadano…

Un pueblo sin cualidades éticas, que no nos permiten ser en su alto porcentaje ciudadanos (as) disciplinados con nosotros mismos, con nuestras familias, con los demás, como trabajadores, como profesionales, así como en todas nuestra diversas ocupaciones que existen para regirnos…

Donde cada vez más nos alejamos de los valores divinos, de la sensibilidad humana, de la calidad social para todos y entre todos…

Cuantas catastróficas barbaridades inmorales, anti éticas, inhumanas observamos a diario, a cada hora, en cada minuto de las 24 horas del día…

Y cuanto dolor, cuanto sufrimientos pasamos los dolientes (as), los padres, las madres, las familias desprotegidas que con tantas precariedades buscamos soluciones a nuestras necesidades que nos están afectando desproporcionadamente...

Cuantas impotencias tenemos que aguantar, que soportar…

Que nos hacer estar hipnotizados, sumisos ante los que creemos con capacidad intelectual, humanas, de dirigirnos a través de los bienes y recursos pagados de nuestros impuestos constituidos en nuestra carta magna.

Pero la realidad es que un pueblo;

Sin una educación correcta, idónea, es un pueblo ignorante, un pueblo atrasado, un pueblo ineficiente, un pueblo donde el más fuerte abusa del derecho ajeno, del derecho a la vida, un pueblo donde no se respeta los derechos y deberes fundamentales consagrados en la carta magna.

El ego, la grandeza, el egoísmo, las ironías, la ambición desmedida de riquezas, hacen de muchos que de una u otra formas nos dirigen ya sea por sus participación comunicativas, políticas, sociales, de servicios público, privados, personas terrestres que muchas veces se endiosan afectando el bienestar y progreso de la patria.

Los cuales si tienen suficientes poder, por sus múltiples funciones para pensar en ellos mismos y no en el bienestar colectivo de los demás…

Pues así nos lo han demostrado a través de la historia contemporánea que por décadas han sido cada vez más visibles, demostrando sus DOBLE MORAL…

La solución a estos males sociales que afectan a nuestro país, no es tan solo erradicar la pobreza, pues como sería una sociedad sin pobres donde no exista una cultura moral, divina, ética, humana, social que les garantice la armonía, el respeto, el progreso y la paz ciudadana…

Pues sería un ejemplo de una anarquía social, una descomposición humana, una sociedad artificial, sin sentimientos, una sociedad de egoísmos personales…

Es fundamental que a la vez eduquemos a nuestras familias, a nuestros hijos, a nuestros niños, a nuestros jóvenes, a nuestra sociedad en general, con una educación idónea, moral, divina, ética, humana, social.

Garantizando la formación de ciudadanos (as) dignos, capaces, profesionales, los cuales cuenten con capacidades intelectuales, cualidades disciplinarias, cualidades científicas, cualidades para discernir entre el bien y el mal, de lo correcto a lo incorrecto, cualidades para saber cuál es su rol social, cualidades para saber elegir que es lo que más le conviene a su pueblo moralmente…

Es nuestro deber y derecho para con nuestra patria, nuestras familias, nuestras futuras generaciones…

Tu, yo, el, ella, todos podemos ser parte de este cambio, de esta transformación a las normas morales…

Que nuestro Dios todopoderoso interponga su mano bendita en toda nuestras conciencias ciudadanas, amén.

Luciano Homero Vásquez Riveros

Cuando pensamos en un programa de gobierno que pueda erradicar la delincuencia, las violencias, la criminalidad, el irrespeto, la corrupción, los embarazos de adolescentes no deseados, los exagerados consumos de juegos (tres veces al día), de alcohol, de sustancia no permitidas, así como tantos males que nos afectan desproporcionadamente a cada ciudadano (a).

Los cuales hemos sentido como a un amigo, conocido o integrante de la familia han sido víctimas de algún hecho o atentado de estos males como conflictos que hemos dejado crear los adultos, los mayores en nuestra desprotegida sociedad…

Nuestras autoridades que en sus diferentes turnos partidarios.

Desde hace décadas conjunto a muchos intelectuales, políticos, dirigentes sociales, eclesiásticos, comunicadores, entre otras personalidades de importancias social, han y aun coinciden en sus distintas opiniones para la soluciones a tantos males sociales que nos afectan, diciendo que la mayor alternativa es;

Erradicar la pobreza, que hasta hoy se han quedado en palabras a medias…

Estas múltiples coincidencias que se manifiestan a conciencia sentida o a des conciencia irreal, las cuales pocos observamos, pero cada vez mas otros se suman, donde vamos observandos;

Sus actitudes.
Sus acciones.
Sus ejemplos.

De doble comportamientos que nos hacen visualizar con un tacto perpetuo como son tan aguerridos para cuidar sus ideales, sus beneficios, su poder, hasta dar sus últimos alientos con un sutil suspiro aterrador para los demás, haciendo prevalecer que en;

Nuestro pueblo quisqueyano.
En su pueblo quisqueyano.

Es mejor mantenerlo sumido en la ignorancia perpetua, creando anarquías, teatros sociales, conflictos sociales, males sociales para poder satisfacer impunemente las oscuras necesidades de ansias descontroladles de unos cuantos que por muchas décadas nos han dirigidos a través de los diferentes partidos dominicanos…

Que para unos cuantos es mejor un;

Un pueblo sin una educación correcta, idónea que no nos permiten tener cierto grado de cultura intelectual, conciencia colectiva, participación ciudadana…

Un pueblo sin conocimientos de las normas morales, las cuales son tan imprescindibles, necesarias, vitales, para la armonía social, la calidad humana de cada persona, de cada ciudadano…

Un pueblo sin cualidades éticas, que no nos permiten ser en su alto porcentaje ciudadanos (as) disciplinados con nosotros mismos, con nuestras familias, con los demás, como trabajadores, como profesionales, así como en todas nuestra diversas ocupaciones que existen para regirnos…

Donde cada vez más nos alejamos de los valores divinos, de la sensibilidad humana, de la calidad social para todos y entre todos…

Cuantas catastróficas barbaridades inmorales, anti éticas, inhumanas observamos a diario, a cada hora, en cada minuto de las 24 horas del día…

Y cuanto dolor, cuanto sufrimientos pasamos los dolientes (as), los padres, las madres, las familias desprotegidas que con tantas precariedades buscamos soluciones a nuestras necesidades que nos están afectando desproporcionadamente...

Cuantas impotencias tenemos que aguantar, que soportar…

Que nos hacer estar hipnotizados, sumisos ante los que creemos con capacidad intelectual, humanas, de dirigirnos a través de los bienes y recursos pagados de nuestros impuestos constituidos en nuestra carta magna.

Pero la realidad es que un pueblo;

Sin una educación correcta, idónea, es un pueblo ignorante, un pueblo atrasado, un pueblo ineficiente, un pueblo donde el más fuerte abusa del derecho ajeno, del derecho a la vida, un pueblo donde no se respeta los derechos y deberes fundamentales consagrados en la carta magna.

El ego, la grandeza, el egoísmo, las ironías, la ambición desmedida de riquezas, hacen de muchos que de una u otra formas nos dirigen ya sea por sus participación comunicativas, políticas, sociales, de servicios público, privados, personas terrestres que muchas veces se endiosan afectando el bienestar y progreso de la patria.

Los cuales si tienen suficientes poder, por sus múltiples funciones para pensar en ellos mismos y no en el bienestar colectivo de los demás…

Pues así nos lo han demostrado a través de la historia contemporánea que por décadas han sido cada vez más visibles, demostrando sus DOBLE MORAL…

La solución a estos males sociales que afectan a nuestro país, no es tan solo erradicar la pobreza, pues como sería una sociedad sin pobres donde no exista una cultura moral, divina, ética, humana, social que les garantice la armonía, el respeto, el progreso y la paz ciudadana…

Pues sería un ejemplo de una anarquía social, una descomposición humana, una sociedad artificial, sin sentimientos, una sociedad de egoísmos personales…

Es fundamental que a la vez eduquemos a nuestras familias, a nuestros hijos, a nuestros niños, a nuestros jóvenes, a nuestra sociedad en general, con una educación idónea, moral, divina, ética, humana, social.

Garantizando la formación de ciudadanos (as) dignos, capaces, profesionales, los cuales cuenten con capacidades intelectuales, cualidades disciplinarias, cualidades científicas, cualidades para discernir entre el bien y el mal, de lo correcto a lo incorrecto, cualidades para saber cuál es su rol social, cualidades para saber elegir que es lo que más le conviene a su pueblo moralmente…

Es nuestro deber y derecho para con nuestra patria, nuestras familias, nuestras futuras generaciones…

Tu, yo, el, ella, todos podemos ser parte de este cambio, de esta transformación a las normas morales…

Que nuestro Dios todopoderoso interponga su mano bendita en toda nuestras conciencias ciudadanas, amén.

Cuando pensamos en un programa de gobierno que pueda erradicar la delincuencia, las violencias, la criminalidad, el irrespeto, la corrupción, los embarazos de adolescentes no deseados, los exagerados consumos de juegos (tres veces al día), de alcohol, de sustancia no permitidas, así como tantos males que nos afectan desproporcionadamente a cada ciudadano (a).

Los cuales hemos sentido como a un amigo, conocido o integrante de la familia han sido víctimas de algún hecho o atentado de estos males como conflictos que hemos dejado crear los adultos, los mayores en nuestra desprotegida sociedad…

Nuestras autoridades que en sus diferentes turnos partidarios.

Desde hace décadas conjunto a muchos intelectuales, políticos, dirigentes sociales, eclesiásticos, comunicadores, entre otras personalidades de importancias social, han y aun coinciden en sus distintas opiniones para la soluciones a tantos males sociales que nos afectan, diciendo que la mayor alternativa es;

Erradicar la pobreza, que hasta hoy se han quedado en palabras a medias…

Estas múltiples coincidencias que se manifiestan a conciencia sentida o a des conciencia irreal, las cuales pocos observamos, pero cada vez mas otros se suman, donde vamos observandos;

Sus actitudes.
Sus acciones.
Sus ejemplos.

De doble comportamientos que nos hacen visualizar con un tacto perpetuo como son tan aguerridos para cuidar sus ideales, sus beneficios, su poder, hasta dar sus últimos alientos con un sutil suspiro aterrador para los demás, haciendo prevalecer que en;

Nuestro pueblo quisqueyano.
En su pueblo quisqueyano.

Es mejor mantenerlo sumido en la ignorancia perpetua, creando anarquías, teatros sociales, conflictos sociales, males sociales para poder satisfacer impunemente las oscuras necesidades de ansias descontroladles de unos cuantos que por muchas décadas nos han dirigidos a través de los diferentes partidos dominicanos…

Que para unos cuantos es mejor un;

Un pueblo sin una educación correcta, idónea que no nos permiten tener cierto grado de cultura intelectual, conciencia colectiva, participación ciudadana…

Un pueblo sin conocimientos de las normas morales, las cuales son tan imprescindibles, necesarias, vitales, para la armonía social, la calidad humana de cada persona, de cada ciudadano…

Un pueblo sin cualidades éticas, que no nos permiten ser en su alto porcentaje ciudadanos (as) disciplinados con nosotros mismos, con nuestras familias, con los demás, como trabajadores, como profesionales, así como en todas nuestra diversas ocupaciones que existen para regirnos…

Donde cada vez más nos alejamos de los valores divinos, de la sensibilidad humana, de la calidad social para todos y entre todos…

Cuantas catastróficas barbaridades inmorales, anti éticas, inhumanas observamos a diario, a cada hora, en cada minuto de las 24 horas del día…

Y cuanto dolor, cuanto sufrimientos pasamos los dolientes (as), los padres, las madres, las familias desprotegidas que con tantas precariedades buscamos soluciones a nuestras necesidades que nos están afectando desproporcionadamente...

Cuantas impotencias tenemos que aguantar, que soportar…

Que nos hacer estar hipnotizados, sumisos ante los que creemos con capacidad intelectual, humanas, de dirigirnos a través de los bienes y recursos pagados de nuestros impuestos constituidos en nuestra carta magna.

Pero la realidad es que un pueblo;

Sin una educación correcta, idónea, es un pueblo ignorante, un pueblo atrasado, un pueblo ineficiente, un pueblo donde el más fuerte abusa del derecho ajeno, del derecho a la vida, un pueblo donde no se respeta los derechos y deberes fundamentales consagrados en la carta magna.

El ego, la grandeza, el egoísmo, las ironías, la ambición desmedida de riquezas, hacen de muchos que de una u otra formas nos dirigen ya sea por sus participación comunicativas, políticas, sociales, de servicios público, privados, personas terrestres que muchas veces se endiosan afectando el bienestar y progreso de la patria.

Los cuales si tienen suficientes poder, por sus múltiples funciones para pensar en ellos mismos y no en el bienestar colectivo de los demás…

Pues así nos lo han demostrado a través de la historia contemporánea que por décadas han sido cada vez más visibles, demostrando sus DOBLE MORAL…

La solución a estos males sociales que afectan a nuestro país, no es tan solo erradicar la pobreza, pues como sería una sociedad sin pobres donde no exista una cultura moral, divina, ética, humana, social que les garantice la armonía, el respeto, el progreso y la paz ciudadana…

Pues sería un ejemplo de una anarquía social, una descomposición humana, una sociedad artificial, sin sentimientos, una sociedad de egoísmos personales…

Es fundamental que a la vez eduquemos a nuestras familias, a nuestros hijos, a nuestros niños, a nuestros jóvenes, a nuestra sociedad en general, con una educación idónea, moral, divina, ética, humana, social.

Garantizando la formación de ciudadanos (as) dignos, capaces, profesionales, los cuales cuenten con capacidades intelectuales, cualidades disciplinarias, cualidades científicas, cualidades para discernir entre el bien y el mal, de lo correcto a lo incorrecto, cualidades para saber cuál es su rol social, cualidades para saber elegir que es lo que más le conviene a su pueblo moralmente…

Es nuestro deber y derecho para con nuestra patria, nuestras familias, nuestras futuras generaciones…

Tu, yo, el, ella, todos podemos ser parte de este cambio, de esta transformación a las normas morales…

Que nuestro Dios todopoderoso interponga su mano bendita en toda nuestras conciencias ciudadanas, amén.

Luciano Homero Vásquez Riveros

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