A petición de la abogada Génesis Peduto, defensora del artista, el magistrado le concedió una fianza en bonos, gracias a que su hermana, Claribel Gálvez, puso dos casas que tiene en Pensilvania y valoradas en alrededor de $100.000 dólares cada una, en garantía.
El bachatero podría salir de la cárcel el viernes de esta semana, dependido del tiempo que tome la verificación de las propiedades y el proceso de la fianza.
El Gringo habló en la audiencia a través de un intérprete en español, cuando el magistrado William I. Garfinkel le preguntó cómo se declara respecto a las acusaciones.
“No culpable”, respondió por conducto de su defensora legal.
El monto de la fianza no fue especificado en la vista. Una nueva fecha de regreso del bachatero a la corte será establecida posteriormente.
La audiencia, que estaba prevista para las 2:00 de la tarde y comenzó poco después de las 4:00 de la tarde.
La esposa de El Gringo, Jenny de Gálvez, y algunos otros de sus familiares como cuñados, hermanos e hijos, estuvieron presentes en la sala federal de justicia, respaldando al acusado.
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