Se recogieron cinco niños haitianos utilizados por cuatro mujeres haitianas y una dominicana en calles de Santo Domingo, dentro de la jurisdicción del Distrito Nacional, para pedirle dinero a los viajeros que estaban dentro de vehículos; pero debe echarse un vistazo por otras partes del otro Santo Domingo, en la jurisdicción de la Provincia de Santo Domingo y aún en otras ciudades del país, en donde no solamente niños haitianos, sino también adultos, operan como simples pedigüeños, a veces interfiriendo el paso de vehículos de motor con grave riesgo para quienes cumplen esas ¿tareas?, y para quienes conducen los automotores que tendrían que responder por acciones que no provocaron.Ojalá, por consiguiente, la mirada de la autoridad se extienda hacia otros lados y busque no solamente a los niños haitianos utilizados para mendigar en esquinas, sino que procure también, corregir el mismo tipo de acciones, acometidas por adultos.
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