FELIX PARRA
Aunque los orígenes antiguos del término cáncer no se conocen con certeza, probablemente deriva de la palabra latina cáncer que significa “cangrejo”, pero se cree que se ha instaurado esta designación porque el tumor se aferra a todo lo que encuentra a su alrededor con la misma obstinación que un cangrejo.
Según explica la nutrióloga Raisa García un tumor es un conjunto de células que se caracterizan por presentar un desajuste en sus mecanismos de control del ciclo celular y en su diferenciación, lo que provoca el incremento del número de células, más allá de las necesidades de crecimiento y reparación del huésped.
Dijo que la obesidad es una enfermedad crónica que se caracteriza por una acumulación excesiva de reservas energéticas del organismo en forma de grasas, y que conlleva un aumento del peso corporal con respecto al esperado según sexo, talla y edad.
“Valorada positivamente en épocas pasadas por nuestra cultura e incluso considerada por algunos sólo como un problema estético, supone una enfermedad con graves consecuencias sobre la salud de quien la padece y sobre la economía de aquellos a quienes corresponde costear sus gastos”, expresa.
Sin embargo,≠ la especialista destaca que la Organización Mundial de la Salud la ha considerado como una epidemia mundial, y debido al auge que ha experimentado en los últimos años se ha convertido en una preocupación.
RELACION CANCER OBESIDAD:
La doctora Raisa García destaca que el exceso de peso supone diversas consecuencias sobre los sistemas cardiovascular, respiratorio, digestivo, osteoarticular, reproductor y endocrino-metabólico.
Además existen relaciones entre la obesidad y algunos tipos de tumores malignos.
Dos grandes grupos de neoplasias relacionadas con la obesidad pueden distinguirse claramente: aquéllas que son producto de la influencia de las hormonas y aquéllas favorecidas por determinados factores de la dieta.
Con respecto a la acción de las hormonas, una importante asociación entre altos valores circulantes de estrógenos (característico de las personas obesas) y el cáncer de endometrio y de mama ha sido descripta. Por ejemplo, el carcinoma endometrial está aumentado en las mujeres obesas sea cual sea el grupo de edad.
Las mujeres con un sobrepeso del 40% tienen cuadriplicada la frecuencia del carcinoma endometrial. Aunque no es claro por qué la obesidad es un factor de riesgo de cáncer de endometrio, se ha sugerido que la exposición a ciertas hormonas y niveles elevados de estrógenos e insulina durante toda la vida en mujeres obesas pueden ser factores contribuyentes.
Existen otros tipos de cáncer, como el de ovario en las mujeres, el de próstata en varones y aquéllos relacionados con el sistema gastrointestinal como el de colon y recto o el de vesícula biliar, cuya mayor incidencia posiblemente esté influenciada por factores de la dieta.
La alimentación occidental podría favorecer el desarrollo de tumores a través de agentes cancerígenos como las grasas animales y las nitrosaminas resultantes de la cocción de las carnes.
RECOMENDACIONES:
La especialista recomienda en primer lugar, a evitar el sobrepeso y la obesidad a través de una dieta equilibrada, que no exceda en cantidad los requerimientos calóricos diarios, baja en sal y grasas y con dos porciones diaria de frutas y vegetales.
Además que no debe faltar al menos 30 minutos de actividad física de intensidad modera y en segundo lugar, las personas con sobrepeso u obesidad deben ser evaluadas por un especialista en nutrición para dar las recomendaciones especificas de alimentación y ejercicio de acuerdo a su nivel de riesgo.
Según explica la nutrióloga Raisa García un tumor es un conjunto de células que se caracterizan por presentar un desajuste en sus mecanismos de control del ciclo celular y en su diferenciación, lo que provoca el incremento del número de células, más allá de las necesidades de crecimiento y reparación del huésped.
Dijo que la obesidad es una enfermedad crónica que se caracteriza por una acumulación excesiva de reservas energéticas del organismo en forma de grasas, y que conlleva un aumento del peso corporal con respecto al esperado según sexo, talla y edad.
“Valorada positivamente en épocas pasadas por nuestra cultura e incluso considerada por algunos sólo como un problema estético, supone una enfermedad con graves consecuencias sobre la salud de quien la padece y sobre la economía de aquellos a quienes corresponde costear sus gastos”, expresa.
Sin embargo,≠ la especialista destaca que la Organización Mundial de la Salud la ha considerado como una epidemia mundial, y debido al auge que ha experimentado en los últimos años se ha convertido en una preocupación.
RELACION CANCER OBESIDAD:
La doctora Raisa García destaca que el exceso de peso supone diversas consecuencias sobre los sistemas cardiovascular, respiratorio, digestivo, osteoarticular, reproductor y endocrino-metabólico.
Además existen relaciones entre la obesidad y algunos tipos de tumores malignos.
Dos grandes grupos de neoplasias relacionadas con la obesidad pueden distinguirse claramente: aquéllas que son producto de la influencia de las hormonas y aquéllas favorecidas por determinados factores de la dieta.
Con respecto a la acción de las hormonas, una importante asociación entre altos valores circulantes de estrógenos (característico de las personas obesas) y el cáncer de endometrio y de mama ha sido descripta. Por ejemplo, el carcinoma endometrial está aumentado en las mujeres obesas sea cual sea el grupo de edad.
Las mujeres con un sobrepeso del 40% tienen cuadriplicada la frecuencia del carcinoma endometrial. Aunque no es claro por qué la obesidad es un factor de riesgo de cáncer de endometrio, se ha sugerido que la exposición a ciertas hormonas y niveles elevados de estrógenos e insulina durante toda la vida en mujeres obesas pueden ser factores contribuyentes.
Existen otros tipos de cáncer, como el de ovario en las mujeres, el de próstata en varones y aquéllos relacionados con el sistema gastrointestinal como el de colon y recto o el de vesícula biliar, cuya mayor incidencia posiblemente esté influenciada por factores de la dieta.
La alimentación occidental podría favorecer el desarrollo de tumores a través de agentes cancerígenos como las grasas animales y las nitrosaminas resultantes de la cocción de las carnes.
RECOMENDACIONES:
La especialista recomienda en primer lugar, a evitar el sobrepeso y la obesidad a través de una dieta equilibrada, que no exceda en cantidad los requerimientos calóricos diarios, baja en sal y grasas y con dos porciones diaria de frutas y vegetales.
Además que no debe faltar al menos 30 minutos de actividad física de intensidad modera y en segundo lugar, las personas con sobrepeso u obesidad deben ser evaluadas por un especialista en nutrición para dar las recomendaciones especificas de alimentación y ejercicio de acuerdo a su nivel de riesgo.
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