PorNurys Rivas.--Como todo acto en los que se involucra la gente, la Semana Santa de Sevilla ha venido sufriendo cambios no en su esencia que continúa siendo igual que hace un siglo, sin embargo, en la actualidad además de ser un acontecimiento sociocultural, su declaración como Interés Turístico Internacional la enmarca como una de las grandes fiestas de primavera.En la evolución han influido factores tanto religiosos como artísticos, sociales e históricos. En pocos lugares se supera la multitud que llena las calles de la capital de Andalucía los días santos, en Sevilla se vive y trabaja para la Semana Santa durante todo el año, ya que las cofradías no descansan en su labor de ensayo y entrenamiento.
Indudablemente la Semana Santa es la Fiesta Mayor de Sevilla, en ella, gran cantidad de cofradías de todos los barrios, realizan el itinerario de su estación de penitencia con cientos de nazarenos y hermanos que acompañan a sus sagradas imágenes en pasos por las calles sevillanas.
Es una experiencia y no precisamente siempre religiosa, vivir una Semana Santa en Sevilla, aunque no se posea una gran vocación por los asuntos religiosos, estar presentes dentro del maremágnum que significa caminar entre la muchedumbre, puede ser una vivencia insuperable.
La conmemoración de la pasión y muerte de Cristo se escenifica a través de procesiones organizadas por las diversas cofradías desde el Domingo de Ramos, hasta el Domingo de Resurrección, durante esa semana se hace el recorrido de cada cofradía hasta la Catedral, cada salida tiene una ruta establecida por Consejo General de Hermandades y Cofradías, éstas son seguidas por un público que no necesariamente lo hace por devoción ya que para estos días los hoteles se encuentran al límite de su capacidad con turistas de diversas partes de España y del exterior que llegan atraídos por la fama de la Semana Santa de Sevilla.
Cofradía es una especie de sociedad cuya existencia data desde la Edad Media, aunque no es hasta el siglo XXI cuando se arraigan como asociaciones que reverencian la pasión y muerte de Cristo rindiéndole culto por medio de una procesión.
No puedo dejar de nombrar entre las más nombradas cofradías de Sevilla, la Esperanza de Triana, Jesús del Poder, María Santísima de la Macarena, Nazarenos, Gitanos, el Silencio, el Calvario, ...
El cortejo procesional de esta Semana Santa tiene símbolos especiales, se abre con la Cruz de Guía, siguiendo los Nazarenos intercalados por un conjunto de insignias donde sobresale el Senatus que se hace en recordación del ejército romano que custodiaba a Jesús, las banderas que porta cada Paso con sus colores pasionarios o marianos. El Simpecado, el libro de reglas y estandarte, tras los cuales desfilan los acólitos y Pasos.
La Madrugá merece un capítulo aparte, es la noche más especial. Sucede entre la noche del Jueves y el Viernes Santo. El orden de paso de las cofradías en la madrugada, se produce en relación con su antigüedad, primero pasa la Hermandad del Silencio, las más antigua y la última la Hermandad de los Gitanos. Sigue un orden acordado donde van pasando todas las Cofradías.
Al amanecer del Viernes Santo se recuerda el juicio ante Poncio Pilatos, la flagelación y coronación de espinas, la condena a muerte de Jesús y su camino con la cruz a cuestas hasta el Gólgota.
La Semana Santa en Sevilla es un tema sagrado del cual no puede hablarse con ligereza, es una de las ciudades donde todavía para mucha gente, es solemne y respetada.
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