martes, 16 de abril de 2013

El periodismo, mis preocupaciones


Directores de medios de comunicación se han referido a los retos, desafíos y realidades  del periodismo dominicano. Me imagino lo incómodo que le resulta a algunos,  abordar este tema y tener que reconocer lo mucho que nos apartamos de un periodismo serio, honesto, que refleje la realidad con objetividad y sobre todo , capaz de presentar todas las corrientes. Saben que solo un periodismo con esas condiciones es el adecuado para informar  bien la población.
    
Es lamentable que algunos medios hayan perdido la misión de informar y educar el pueblo, por hacer negocios rentables. Están económicamente comprometidos con determinadas corrientes. Se ven precisados a evadir o rechazar, temas que se aparten  o atenten contra sus proveedores. Eso trae como consecuencia, que los mensajes  que envían  son   patrones impuestos, que impiden el libre juego de las ideas.
    
Con motivo del Día del Periodismo, algunos directores han hecho recomendaciones a universidades y escuelas de comunicación para formar mejores profesionales en esa área. Sugieren proporcionar a  los estudiantes, mecanismos de ampliar su nivel cultural, mejorar la gramática,  ortografía, redacción, facilidades de prácticas en talleres, imprentas, para que sepan manejarse cuando vayan a redacciones. Piden que  los  motiven  a dedicar más horas a la lectura  e investigar las noticias.
    
Parecería ser que la idea es  cuidar  de la estructura, métodos,  técnicas,   pero ¿Cómo cuidar de la esencia,  misión, ética?  No hacerlo es tirar todo al zafacón. Insisten en que deben adaptarse a los nuevos tiempos. ¿Qué significa eso? ¿Cambios en la forma o el fondo?  Me resisto a pensar que  sea proteger la comercialización de las ideas, lo mercurial,  el apoyo a determinada ideología, grupo o institución para sacar ventajas. Preocupa que dejen en  segundo plano, el periodismo honesto, que busca la verdad y respeta  principios. Ese es el sello del que persigue  elevar el nivel educativo  de la población.
    
No me preocupan las estrategias y técnicas que utilicen los periodistas para informar y dar un palo periodístico. Todo vale  si esta dentro de la ética profesional. Lo que  deforma, limita y anula profesionalmente, no es solo  la enseñanza deficiente en el centro académico, muchas veces son los empleadores. Aquellos directores de medios que  invierten las prioridades,  limitan el campo de acción, la forma de decir las cosas y  obliguen al periodista a  archivar la ética y  responder a intereses particulares, privándolos de actuar libremente. Es un decirle,  se ajustan a las reglas del juego  o les cierro las puertas. 
    
Que falta hacen periodistas de la talla de Rafael Herrera!..Sencillo, objetivo, sincero, libre, realista, conciliador, le daba cabida a todas las ideas. No estaba titulado como tal pero dominaba lo esencial,  los principios éticos. Estaba  super consciente del rol de la prensa en la sociedad, como instrumento de cambios y desarrollo.  Sabemos que los medios de comunicación tienen gran  poder, pero a la vez,  son escuelas. Sus lecciones   llegan a toda la población. Cuando son falsos, retorcidos o presentan una sola cara de la moneda, deforman la nación. Don Rafael cuidaba de que no sucediera. Reconocía que la corrupción andaba por doquier pero supo manejarla para que no dominara el periódico que dirigía. ¡Cuánto lo necesitamos!.
    
Indiscutiblemente,  no solo deberían hacer paneles donde los directores de medios  evalúen el periodismo sino donde a ellos, les refresquen la memoria sobre ética  profesional, sobre los aportes de una prensa libre que le de cabida a todas las corrientes del pensamiento y donde  ponderen  las desventajas  de estar al servicio de   grupos determinados.

0 comentarios:

Publicar un comentario