Felucho Jiménez provoca revuelo en PLD

Las declaraciones del dirigente del Comité Político del Partido de la Liberación Dominicano, Félix Jiménez, crearon ayer jueves un gran revuelo entre legisladores del partido oficial y aliados, al decir que en estos momentos, el PLD no tiene un candidato presidencial claro para las elecciones del 2016. 

Para el senador de la provincia Espaillat, José Rafael Vargas, dijo que hablar de candidatura presidencial en este momento es extemporáneo, porque el PLD está abocado a su Congreso.   

Expresó que todo dirigente tiene derecho aspirar a una candidatura, pero lo que está claro es que el expresidente Leonel Fernández es la persona  que ha ganado cinco procesos electorales con más de un 50% del electorado, en los últimos 20 años en el país.

Apuntó que Fernández “es el cerebro mejor armado” que tiene la política dominicana, el líder más reconocido y de más prestigio  a nivel nacional e internacional que tiene la República Dominicana.

Afirmó que el expresidente Fernández está sirviendo de soporte al gobierno del presidente Danilo Medina Sánchez, junto otros dirigentes.

En tanto, que el diputado José Ramón Cabrera, dijo que diciente que el expresidente 

Fernández sea el soporte del gobierno, tras señalar que el principal  activo  del gobierno  es el presidente Medina y la aplicación de sus políticas económicas a favor de los pobres.

Entiende que Fernández es un soporte al PLD y de respaldo a su Presidente  y al gobierno. 

“No estoy de acuerdo con eso que dice el senador Vargas, dijo y agregó que es muy temprano hablar de candidatura.

Dijo que en este momento el PLD no tiene un candidato presidencial para el año 2016, y añadió que es legítimo aspirar a una candidatura.   

Mientras que la diputada Minerva Tavárez Mirabal (Minou), dijo que respeta la posición de Felucho Jiménez, pero entiende que todo  el mundo tiene derecho a aspirar, y que eso, no necesariamente significa grupismo ni violación a los estatutos del partido.

Entiende que los partidos políticos son instancias públicas para alcanzar el poder.   

Consideró además que nadie puede cuestionar que los militantes y los líderes de los partidos puedan aspirar legitimaste a una posición, por lo contrario, es negar de alguna manera la naturaleza de la política.