Manhattan, Nueva York.-No es un secreto para nadie que la migración criolla hacia Estados Unidos ha costado esfuerzo, sacrificio, tenacidad y compromiso, y que eso, tiene hoy como resultado una pujante comunidad que impacta de manera positiva en el desarrollo de ambas naciones.
Los dominicanos que residen en Nueva York, Nueva Jersey, Connecticut y Pennsylvania forman parte de una de las comunidades más activas y vibrantes de los Estados Unidos y de las fuerzas económicas más importantes de República Dominicana.
A juicio del cónsul general de República Dominicana en Nueva York, Félix Antonio Martínez, casi un millón de dominicanos de primera, segunda y tercera generación impulsa la movilidad de divisas y el comercio bilateral.
Martínez, quien concedió una entrevista a este diario, abrió las puertas de su despacho en Manhattan para hablar de los retos y logros de la comunidad que representa en esa gran urbe, pues entiende que los problemas de la diáspora competen al Consulado dominicano, encargado de velar y responder por las necesidades de servicios y de documentos legales.
Hay un fenómeno significativo, destacó, y es que cada día nosotros somos el grupo puntero en términos de minoría en sobrepasar el bachillerato e inscribirnos inmediatamente en la universidad, lo que está marcando una tendencia de progreso, porque camina paralelamente el grado académico con los ingresos y las oportunidades de desarrollo de las familias.
“Un joven que va a la universidad es una persona que se supera y va a salir de la pobreza de manera automática, nosotros tenemos el mayor índice de dominicanos que ingresa a las universidades”, subrayó Martínez.
Una comunidad próspera
En cuanto al comercio, planteó que hay una impresionante cantidad de dominicanos que son dueños o administran negocios informales, como las bodegas, que son un sector millonario, la industria de los taxis, y que hay otros que salieron de ahí y entraron a las áreas de supermercados, un área multimillonaria en términos de movimiento de la economía.
Resaltó que la comunidad todos los días adquiere viviendas nuevas y negocios, y que en todos los sentidos se han ido adaptando a esa sociedad y progresando en ella, también para beneficio de esta patria.
Destacó que hay una impresionante cantidad de dominicanos que ha hecho carrera en el gobierno. Hizo referencia a los concejales, que tienen un peso específico en lo que es el presupuesto, los planes y la política que ejecuta la ciudad en cada vecindario.
Para el bienestar social
Desde que inició su gestión, hace poco más de diez meses, en la sede consular se han gestado iniciativas y programas destinados a mejorar la calidad de vida de los residentes, como la Ventanilla de Salud, que busca contribuir con la preservación de un buen estado de salud de los inmigrantes dominicanos, facilitándoles el acceso a los servicios en varios hospitales.
Por otro lado, indicó que recientemente abrieron la Ventanilla de Educación, un espacio que trabaja de la mano con la Fundación New Futuro para dar asistencia a los dominicanos en materia de educación, sin importar la edad, pues les ayudan a localizar los centros de enseñanza, desde un kínder, Day care o estudio diurno hasta una persona que quiere ir a la universidad.
En apoyo a la educación
La Ventanilla de Educación tiene la particularidad de asesorar a la comunidad estudiantil sobre los programas de becas en cada universidad, pues entienden que donde está la mayor necesidad es en estudiantes de origen dominicano que llegan bachilleres y no saben los trámites correspondientes, o dónde están las becas disponibles, por ello la sede consular hace una investigación y los orienta en este sentido.
Bajo la Ventanilla de Educación se ejecuta el programa “Quisqueya Aprende contigo”, donde el Consulado dominicano en NY es pionero en el exterior en implementarlo, en el que se han incorporado alrededor de 250,000 personas.
La sede implementó el programa “Caminando”, que está en la etapa de localizar voluntarios para que sean facilitadores. Para monitorear que esta ventanilla trabaje bien hay una junta que la integran, además del cónsul Martínez, diputados de Ultramar y representantes de los sectores educativo, empresarial, religioso y comunitario.
El funcionario informó que una parte de los recursos del Consulado están destinados a apoyar a los reclusos criollos en Nueva York, pues dijo que aunque han delinquido la ley manda a dar asistencia general a los dominicanos sean reclusos o no.
Dentro de la novedad de la sede consular está el periódico “Consulado RD”, con una tirada mensual.
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