María Isabel Serrano Diná.A medida que crece la ciudad, aumentan sus habitantes y se multiplica la contaminación. Mientras mas pobladas son las ciudades, mas arborización necesita; es la única forma de mejorar el medio ambiente, el desarrollo integral y la salud de sus habitantes.
Con la previsión del crecimiento poblacional mundial en las ciudades, calculado en un aumento del 60% para el 2030, los árboles representan la mejor estrategia para compensar la contaminación por sobrepoblación, mejorar la calidad de vida de sus habitantes, y desarrollar ciudades planificadas y sostenibles.
Aumentar la cantidad de árboles en la ciudad tiene sus ventajas. Además de reducir la contaminación, aportan oxígeno mejorando la calidad del aire.
¿Sabes cómo funciona el sistema de filtro de los árboles? Estos absorben y retienen el aire viciado a través de sus hojas, raíces y corteza; transformando el CO2 y otros gases tóxicos en fotosíntesis. Además de gases, sus hojas retienen el polvo y las partículas que flotan en el ambiente, limpiando y purificando el aire que respiramos.
Cuando los árboles son podados ó talados abruptamente, toda la contaminación retenida, queda liberado nuevamente al ambiente, exponiendo nuestra salud y reduciendo la reserva de oxígeno de la ciudad.
Un sólo árbol captura la contaminación producida por 100 autos en un día y para abastecer el oxígeno de una persona por día se necesita la cantidad de 22 árboles. Reduciendo la población de árboles, disminuimos nuestras propias posibilidades de vivir.
Los árboles bloquean y absorben el ruido urbano, regulan la temperatura del ambiente, nos proveen de sombra, mantienen la humedad, aportan belleza al paisaje incrementando el costo y revalorización de las propiedades, sirven de barrera para el viento y de protección contra la erosión hídrica, producen alimentos a todos los seres vivos, sirven de nicho, refugio natural y orientación para la preservación de la biodiversidad. Además los árboles ayudan a combatir el efecto invernadero, causante del calentamiento global.
Por sus cualidades físicas, ambientales y psicológicas fomentan el desarrollo sano de la vida en la ciudad, ayudando a reducir las afecciones respiratorias como el asma y las alergias.
El Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) demuestró en unos estudios, en los cuales contribuyeron 123 científicos de todo el mundo, la influencia positiva del arbolado urbano y su contribución a la salud integral de las personas, incentivando con los resultados arrojados, el desarrollo urbano eficiente y sostenible.
El secretario ejecutivo del Convenio de las Naciones Unidas sobre la Diversidad Biológica (CDB), Braulio Ferreira de Souza Dias, expresó su preocupación ante la forma en que nuestras ciudades se diseñan, la manera de vivir en ellas y las decisiones políticas de las autoridades locales, y cito: "La innovación no radica tanto en el desarrollo de nuevas tecnologías de infraestructura y enfoques, sino en trabajar con lo que ya tenemos. Los resultados suelen requerir menos recursos económicos y son más sostenibles".
Según Achim Steiner, Subsecretario General de las Naciones Unidas y Director Ejecutivo del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, y cito: "Este informe hace un fuerte argumento para que los planificadores urbanos y los gestores de los activos basados pongan mayor atención a la naturaleza dentro de los límites de las ciudades. El desarrollo urbano sostenible apoya valiosos ecosistemas y presenta una gran oportunidad para mejorar las vidas, los medios de subsistencia, y acelerar la transición hacia una economía verde inclusiva".
El tema del arbolado urbano presenta connotaciones importantes en el nuevo modelo de desarrollo de las ciudades del futuro, enfatizando la necesidad de crecer en un entorno que promueva la perfecta armonía entre hombre y naturaleza viva.
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